El nacimiento de un bebé también da a luz a una nueva madre. Tener un bebé nos cambia. Las investigaciones confirman que casi todas las mujeres sufren “cambios fundamentales” después del parto que realmente alteran sus cerebros. Sí, tu cuerpo, tus relaciones, prioridades y tu vida cambian, pero también tu sentido de ser. Esto no es algo que la mayoría de las mujeres esperan que suceda. Como dijo una mamá del Proyecto Cuarto Trimestre, “Ya no soy Ashley, soy la mamá de Aiden.” Aunque la mayoría de las mujeres están felices están al convertirse en madres y abrazarse a sí mismas, encontrar el “nuevo yo” es tan importante como llorar un poco por las partes de ti misma que pueden quedar en el olvido por un tiempo. El período posparto es un tiempo de nuevos aprendizajes, sentimientos, desarrollo de habilidades y crecimiento. La maternidad es poderosa y también toma un poco de tiempo para acostumbrarse.
Convertirse en madre es sin duda el cambio físico y psicológico más significativo que una mujer experimentará. Este cambio de identidad puede ser experimentado por los padres y las parejas. Las mujeres, sin embargo, pasan por los cambios hormonales del embarazo, las cuales pueden tener una experiencia neurobiológica específica (fuente).
Volver al trabajo, a la escuela y/o a los roles anteriores puede desencadenar sentimientos de ansiedad y ser un momento particularmente vulnerable. Equilibrar el trabajo, la vida diaria y el cuidado y la alimentación de un bebé es un reto. Las preocupaciones acerca de cómo los compañeros de trabajo, amigos, maestros te percibirán a tu regreso son comunes.
¿Cómo puedo manejarlo?
- Piensa en una o dos cosas que encuentras que son las más esenciales para tu capacidad de sentirte bien. Para algunas mujeres esto podría ser hacer ejercicio o pasar tiempo con tu mejor amiga o leer un libro o hacer algo especial para ti. Si hay algo que te hace sentir única y ser tú, eso merece ser una prioridad.
- Sé realista sobre tu carga de trabajo y tus objetivos. Esto puede ser difícil si tienes un jefe o compañeros de trabajo exigentes, pero si tienes la oportunidad de establecer límites, ahora es el momento de hacerlo.
- Encuentra una nueva rutina que te permita sentirte bien física, mental y emocionalmente – cuidarte a ti misma es crucial para que puedas cuidar de tu bebé y tus seres queridos.
- Encuentra pequeñas maneras de fomentar las relaciones con tu pareja, tus otros niños y tus seres queridos, ¡planifica con anticipación, haz cosas sencillas y recuerda que un simple mensaje de texto puede llegar muy lejos!
- Haz un ayuno de las redes sociales: limita el uso de las redes sociales o elimina a las personas/cuentas que no son edificantes para ti.
- ¡Habla con una amiga que te apoye! Valórate a ti misma y tu tiempo separado de tu papel como madre.
- Saca tiempo para hacer algo que te guste, eso puede significar pedir apoyo para dejar al bebé por un rato.
- Anota una cosa cada día por la que estés agradecida o menciona “un triunfo como mamá” – ¡algo simple! Encuentra el humor y lo positivo en las rutinas diarias, ¿dónde puede haber pequeñas alegrías en un día ajetreado?
- Las cosas siempre estarán cambiando: las exigencias físicas de cuidar a un recién nacido y a los niños pequeños son intensas. ¡Pero se hace más fácil! Saber que los niños pequeños pasan por diversas etapas puede ayudar.
Lee las experiencias de otras madres y cómo encontraron apoyo para manejar su nueva identidad.
Recursos adicionales para explorar:
- Un libro que nos encanta, “Mama Bare,” comparte historias de madres y familias que hacen la transición a sus nuevos roles como madres y padres (en inglés)
- El nacimiento de una madre
Recursos a considerar para la crianza LGBTQIA+:
- Recurso de la Campaña de Derechos Humanos* (en inglés) que aborda múltiples ángulos sobre las familias homosexuales y la crianza.
- Los Futuros Padres Gays (en inglés)
- La Igualdad en la Familia (en inglés)
- El Instituto Fenway (en inglés) – centro de información con recursos estatales y nacionales